domingo, 4 de septiembre de 2016

The Ring (La Señal)

"Morirás en siete días".

Cuando era pequeño, prácticamente cualquier cosa me daba miedo. Por la noche, me venían a la cabeza pensamientos horribles, y en ocasiones, no llegaba a dormir nada. Un día me hablaron de The Ring, y me contaron que era de las películas más terroríficas que se habían hecho. Años después, me quedé sólo en casa, y decidí verla, quedando profundamente decepcionado. La volví a ver ayer por la noche, y mi opinión no cambió.

Porque por mucho que diga la gente, The Ring no da miedo. No es una buena película de terror. Sería una película aceptable de misterio con un toque sobrenatural, pero no es así como nos la han anunciado, sino como una película de terror que te pondrá los pelos de punta. Y lamentablemente, The Ring fracasa en generar terror en el espectador.

En su momento The Ring creó la mayor parte de los tópicos de las películas de terror que conocemos actualmente, incluyendo el uso del personaje de la niña pálida de pelo largo y negro, que va vestida de blanco. También inició una oleada de remakes de películas de terror japonés como The Grudge (El Grito), Dark Water (La Huella), Conexión, o Llamada Perdida. Hay que darles crédito por eso. Sin embargo, creo que hay que valorar The Ring por cómo funciona como película, en lugar de centrarnos en lo que vino después. Por eso, creo que The Ring es una película innovadora, sí, pero mediocre en su ejecución.

"Todos sufrirán".

La película comienza con dos chicas jóvenes, Katie y Becca, teniendo una conversación sobre los peligros de la televisión. En determinado momento, cambian de tema para hablar de una leyenda urbana, sobre una cinta de vídeo que, siete días después, provoca la muerte de todo el que la vea. Convenientemente, una de las chicas revela que vio la cinta una semana antes, y minutos de metraje después, somos testigos de su muerte. O no, porque en realidad lo único que se nos muestra el grito de la chica, y después fundimos a negro.

Tras este prólogo poco original y bastante aburrido, se nos muestra por primera vez a la verdadera protagonista del filme, una periodista llamada Rachel Keller, que a su vez resulta ser la tía de la chica fallecida. A petición de la madre de ésta, Rachel decide investigar el misterio que rodea a la cinta de video, lo que la colocará en una carrera contra el tiempo mientras trata de descubrir la forma de salvar su vida y la de su hijo, que también vio la cinta de video por error.

El principal problema del guión, escrito por Ehren Kruger y basado en la película japonesa homónima estrenada en 1998, es que nunca consigue sorprender al espectador. En todo momento tenemos la sensación de que todo eso ya lo hemos visto antes. En una película de terror, ésto es algo imperdonable, ya que sorprender al espectador es muy importante para que éste vea la película con tensión, y sin saber lo que viene después. En el caso de The Ring, sabemos siempre lo que va a pasar a continuación, y nunca llegamos a estar asustados del todo.

El guión acierta en contar la historia lentamente, y centrarse en la figura y el pasado de Samara Morgan (la antagonista). Me gusta mucho la historia de fondo que preparan para Samara; es interesante, triste, y la convierte en un personaje atormentado por el que te preocupas, en lugar de un personaje simplemente malo sin ningún tipo de motivo. Al acabar la película tenemos muchas preguntas sin resolver, y otros aspectos de la película directamente no tienen ningún sentido. ¿Cómo grabó Samara la cinta? ¿Por qué llama al teléfono cada vez que alguien ve la cinta? ¿Por qué la cara de las personas que han visto la cinta aparece borrosa en las fotografías? Bueno, ya paro, para no soltar demasiados spoilers.

"Antes de morir, verás la señal".

Entre lo poco decente de esta película se encuentra el trabajo de dirección por parte de Gore Verbinski, más conocido por ser el director de las tres primeras películas de Piratas del Caribe. Verbinski demuestra estar por encima de la calidad media de la película, y es su dirección la que la salva de ser un desastre. Con sus planos y sus filtros azulados y grisáceos refleja muy bien la sensación de miedo y de peligro que sienten nuestros protagonistas, y es capaz de crear algunas escenas de tensión. Disfruta generando anticipación para los sustos, pero todo eso no sirve de nada si luego el susto no llega. Al final, uno es incapaz de tomarse en serio la película, ya que prácticamente nunca tenemos escenas de verdadero terror. 

El montaje corre a cargo de Craig Wood, habitual colaborador de Gore Verbinski. Wood consigue generar el terror que le faltaba al guión, mediante el uso de repentinos cortes que muestran imágenes perturbadoras. Estos cortes son bastante aleatorios, y tan sólo proporcionan uno o dos sustos baratos, pero al menos, son inesperados. Recordemos que en esta película lo inesperado escasea. Lo peor del montaje llega en la parte final, en la que se vuelve irregular y se hace interminable. Hasta en tres ocasiones nos parece que la película va a terminar, y luego continúa con más escenas. 

"No quiero hacerles daño, pero lo hago".

Protagonizando la película tenemos a Naomi Watts, que hace lo que puede interpretando a Rachel. Watts es una gran actriz, pero aquí su actuación no pasa de correcta, por culpa de un guión que no le deja espacio para mucho más. El guión apenas se preocupa por desarrollar los personajes; éstos no son más que tópicos sin ningún tipo de historia ni trabajo detrás. Lo mismo digo con Brian Cox, otro gran actor desaprovechado interpretando al padre de la "criatura", Richard Morgan.

Martin Henderson está horrible como Noah Clay, el personaje que acompaña a la protagonista durante la película. Su interpretación es, simplemente, mala. En ningún momento llega a sobresalir ni ganar presencia en la pantalla, y tampoco resulta simpático para el espectador. David Dorfman realiza un mediocre trabajo como Aidan Keller, el hijo de la protagonista, que más bien parece un calco de Haley Joel Osment en El Sexto Sentido, sólo que este último sí lograba ponernos los pelos de punta.

Daveigh Chase interpreta a Samara. Su presencia en la película es muy reducida, pero se ha convertido en un icono del cine de terror. Es una pena que un personaje tan espeluznante esté tan desaprovechado. Tenemos que esperar más de hora y media para poder ver a Samara Morgan en todo su esplendor, y aunque la escena no decepciona, desearía que hubieran utilizado más al personaje. 

La banda sonora está compuesta por Hans Zimmer, siendo de lo mejor de la película. Una banda sonora inquietante, que merecía una película que estuviera a la altura. Tener a un compositor como Zimmer (Piratas del Caribe, Batman Begins) en tu película es todo un lujo que no se puede desaprovechar. Si alguien quiere escuchar la estupenda banda sonora de The Ring, la tiene en Spotify.

"Ella nunca duerme".

Admito que The Ring fue una película importante para el género en su momento, pero en lineas generales, es una película mediocre. Tiene su mérito, porque inventó varios de los estereotipos que todavía se siguen utilizando en el cine de terror actual, pero desearía que la ejecución de los mismos hubiera sido mejor, y que no hubiera desaprovechado talentos como Verbinski, Watts, o Zimmer. En la época de su estreno, su fórmula fue innovadora, pero estaba lejos de ser perfeccionada. Hay películas posteriores que utilizan esquema y estilo similar a The Ring y que, sin embargo, son mejores que ésta.

La semana que viene cambia el número de entradas en el blog por semana. Serán dos o tres, dependiendo del tiempo que tenga, ya que me voy de viaje y cuando vuelva, comenzará el curso. Trataré de escribir mi opinión sobre la secuela de The Ring antes de que se acaben los siete días que me quedan de vida, tras haber visto la perturbadora cinta de video. Un saludo.


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